Dehidroepiandrosterona, DHEA

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Dehidroepiandrosterona, DHEA

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Descripción

DHEA

La hormona juvenil dehidroepiandrosterona (DHEA) 120 tab [25 mg / tab]

 

1. Introducción

DHEA es una abreviatura de dehidroepiandrosterona y es una hormona esteroide suprarrenal. Las hormonas son sustancias que se forman en glándulas o tejidos y tienen un efecto metabólico en otras células (células diana). Las hormonas son un grupo de sustancias inconsistentes.

Hay proteohormonas como B: insulina, que es producida por ciertas células en el páncreas y que reduce los niveles de azúcar en sangre. Consisten en cadenas de aminoácidos (péptidos) o derivados de aminoácidos. Otro grupo son las hormonas esteroides, que se derivan del colesterol. Además de la DHEA, esto también incluye hormonas sexuales (andrógenos, estrógenos) y hormonas como la aldosterona (regula la función renal) y la cortisona.

Debido a su carácter lipofílico (solubilidad en grasas), las hormonas esteroides pueden atravesar fácilmente las membranas celulares y unirse a una proteína receptora dentro de las células. Esto también explica por qué las hormonas esteroides pueden tener una gama tan diversa de efectos.

El complejo hormona-receptor ingresa al núcleo celular y estimula la transcripción (lectura de los genes) para que se puedan formar proteínas específicas (enzimas).

La DHEA es la hormona más común en la sangre (15-20 mg / día) y se presenta en concentraciones aún más altas en el cerebro. La DHEA fue en 1931 por A. Butenandt (químico alemán, premio Nobel) en el ser humano. Detección de orina. Se produce en la corteza suprarrenal (zona reticularis), convertido por el hígado en el sulfato DHEAS (descubierto en 1944), por lo que circula de manera relativamente estable en la sangre, principalmente durante el día, y se transforma en el cuerpo en las hormonas sexuales testosterona. y estrógeno. El efecto sexual es aproximadamente el 10% del de la testosterona. (Datos f. Biochem Res. Oxford. Science Publ. 1984, p. 193)

Glándulas hormonales del cuerpo.

La producción es más alta a la edad de 25 años y luego disminuye constantemente al 5% del máximo a los 85 años. Este no es el caso de otros esteroides. La primera determinación precisa de la producción de DHEA en función de la edad fue realizada en 1958 por Max-Fernand Jayle, bioquímico de la Universidad de París. Las mujeres producen más DHEA que los hombres.

Actualmente se comprende más o menos el papel biológico exacto. Debido a su papel precursor de las hormonas sexuales, entre otras cosas, a la DHEA se le ha asignado el papel de una hormona amortiguadora, que influye en la disponibilidad de otros esteroides. Sin embargo, la adición de DHEA en experimentos con animales y humanos mostró efectos contra el envejecimiento, el cáncer y las infecciones virales, entre otras cosas.

Entre 1972 y 1997 se publicaron más de 4000 publicaciones sobre DHEA en todo el mundo; hasta 1991 numerosos estudios demostraron los efectos beneficiosos contra varios tipos de cáncer, arteriosclerosis, pérdida de peso y aumento de la vida útil de los animales. A partir de 1994, la investigación se llevó a cabo principalmente sobre los efectos en humanos y hasta ahora ha producido resultados comparables.

En los EE. UU. Y otros países, la DHEA ya se comercializa a gran escala y, a veces, se la denomina medicamento milagroso. De las publicaciones predominantemente muy positivas se deduce que la administración de DHEA mejora el estado de ánimo, aumenta la actividad y la disposición sexual, contrarresta las hormonas del estrés, mantiene la condición muscular, fortalece el sistema inmunológico y reduce el riesgo de cáncer y enfermedades cardíacas. Se dice que la DHEA es eficaz incluso contra el SIDA, la osteoporosis y el Alzheimer.

Una de las extensas publicaciones proviene de Mohammed Kalimi y William Regelson 1990: “El papel biológico de la DHEA”, en la que científicos de todo el mundo presentan sus resultados sobre la sustancia mensajera DHEA posiblemente más importante en 24 capítulos. Son impresionantes. En el prólogo del editor puedes leer:

“La DHEA afecta la diabetes, el cáncer, el desarrollo de tumores, la textura de la piel, la fatiga, la depresión, la memoria y las reacciones inmunes. Con una gama tan amplia de aplicaciones clínicas, es sorprendente que no se hayan escrito más libros sobre la DHEA ".

2. DHEA y cáncer

Los primeros estudios de Inglaterra [Bulbrook, 1962, 1971] encontraron que la DHEA se encontraba en niveles anormalmente bajos en mujeres que tenían cáncer de mama, incluso hasta nueve años antes de que se diagnosticara la enfermedad. De las 5.000 mujeres del estudio, 27 desarrollaron cáncer de mama. La mayoría de los 27 tenían niveles extremadamente bajos de DHEA. Si los niveles bajos de DHEA promueven el cáncer de mama, ¿también se permite la conclusión inversa?

Dr. A. Schwartz de Temple University USA descubrió que la adición de DHEA a los cultivos celulares previene la toxicidad de los cancerígenos (factores cancerígenos). Normalmente, los cultivos celulares responden significativamente con mutaciones en el ADN, cambios en la apariencia celular y una alta tasa de muerte. Todos estos efectos se redujeron significativamente cuando se administró DHEA. En los ratones que fueron tratados con agentes cancerígenos, los que también recibieron DHEA no desarrollaron cáncer de mama. En otros estudios, se ha observado una reducción en la tasa de tumores de hasta un 80%. [Schwartz 1981, 1984] El conocido investigador de DHEA W. Regelsen declaró: "Siempre que se probó la DHEA en un entorno modelo para la carcinogénesis y la inducción de tumores, la DHEA tuvo efectos preventivos".

Aunque la DHEA se está probando actualmente en tumores humanos, aún no se sabe si los efectos son similares en los humanos.
Hay que decir que los ratones y las ratas se utilizaron como objetos de prueba durante mucho tiempo antes de los estudios en humanos. Hasta ahora, los resultados han sido en su mayoría similares o idénticos.

3. DHEA contra la obesidad

Simultáneamente con la investigación sobre los efectos de la DHEA en el cáncer, se investigaron los efectos de la DHEA en ratones genéticamente obesos. Aunque los ratones tratados con DHEA comieron normalmente, permanecieron delgados. Y vivió más que los ratones de control. En otro experimento, se encontró que incluso las ratas gordas de mediana edad perdían peso cuando se les alimentaba con dietas suplementadas con DHEA. La diabetes, una consecuencia típica de la obesidad, también se redujo drásticamente.

4. DHEA y el metabolismo

La DHEA y DHEAS obviamente tienen diversos efectos en el metabolismo. Éstos son algunos de ellos:

Como hormonas esteroides precursoras de la glándula suprarrenal, se convierten en andrógenos (hormonas sexuales masculinas) y estrógenos (hormonas sexuales femeninas) en los órganos y tejidos diana, según las enzimas correspondientes. Aproximadamente el 50% del total de andrógenos se forman a partir de estos dos precursores en los hombres y aproximadamente el 75% en las mujeres. El hígado convierte la DHEA en DHEAS cuando se ingiere por vía oral.

Debido a su solubilidad en grasas, las hormonas esteroides pueden penetrar fácilmente la membrana celular, se unen a un receptor en la célula y actúan como un complejo hormona-receptor en el ADN (información genética) en el núcleo celular, mediante el cual los genes se leen e implementan allí. . (Formación de enzimas).

DHEA en el DÍA

Varios investigadores encontraron que la DHEA inhibe la enzima glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PDH), una enzima que descompone la glucosa. En este caso, la glucosa se convierte, entre otras cosas, en la denominada ruta de las pentosas fosfato. Ribulosa-5-fosfato (para la síntesis de nucleótidos) y 3-P-gliceraldehído, que se vuelve a introducir en la glucólisis. Luego se forma BTS, que luego se convierte en AcetilCoA, entre otras cosas, el precursor de los ácidos grasos y, por lo tanto, de las grasas. El ciclo de la pentosa fosfato juega un papel particularmente en el hígado, el tejido adiposo, la glándula suprarrenal, la tiroides y los eritrocitos (glóbulos rojos), pero no en los músculos. En la mayoría de los tejidos, esta vía metabólica depende, p. Ej. B. junto con la síntesis de ácidos grasos.

Por tanto, la DHEA inhibe la síntesis de grasas.

La DHEA también estimula la actividad de la enzima antioxidante catalasa en el hígado, una enzima que descompone el H2O2 (peróxido de hidrógeno; veneno celular) que se produce durante la descomposición de sustancias. Se promueve la maduración completa (estimulación de la formación de ARNm a partir de genes enzimáticos) de los peroxisomas (orgánulos celulares, por ejemplo, células hepáticas) que contienen catalasa. [Mol. Pharmacol. 50: 67-74 (1996)]

Esto promueve los procesos antioxidantes. [Biochem. J. 301: 753 – 8 (1994)]
La DHEA aumenta la producción de interferón en las células T activadas (glóbulos blancos que luchan contra las células infectadas por virus).

Por tanto, la DHEA protege contra las infecciones virales. [J. Endocrinol. 150: S209-S220 (1996)]

La DHEA promueve la formación de células productoras de insulina y aumenta la sensibilidad a la insulina.

[En el. J. Med. Sci. 306: 320-324 (1993)]
La DHEA puede reducir considerablemente el riesgo de ataque cardíaco. [En el. J. Med. Sci. 311: 205-210 (1996)]

Activación del metabolismo cerebral en el prosencéfalo y otras partes del cerebro por la DHEA. Puede aumentar la diferenciación de las células nerviosas. [J. Neurosci. 16: 1193 – 202 (1996)], [Proc. Natl. Acad. Sci. EE.UU. 92: 3774-8 (1995)]

5. DHEA y envejecimiento

La producción de DHEA en el cuerpo cae de alrededor de 30 mg a la edad de 20 a menos de 6 mg por día a la edad de 80. Según el Dr. W. Regelson, Medical College Virginia, DHEA es uno de los mejores MARCADORES bioquímicos para la edad cronológica. En algunas personas, la DHEA disminuye un 95% durante la vida, la mayor disminución de los principales bioquímicos conocida hasta la fecha.

En estudios con animales, la DHEA prolongó la vida de los roedores en un 50%. Los animales no solo vivían más, parecían más jóvenes. Los animales de control de pelo gris se podían distinguir fácilmente de los animales tratados con DHEA de pelo negro y liso.

Los niveles de DHEAS se correlacionan directamente con la mortalidad (probabilidad de muerte) en humanos.

En un estudio de 12 años de 240 hombres de 50 a 79 años, los científicos encontraron que los niveles de DHEAS son inversamente proporcionales a la mortalidad, independientemente de si un ataque cardíaco u otra causa provocó la muerte. Un aumento de 1 mg / litro en la concentración de DHEAS correspondió a una reducción del 48% en la mortalidad por infarto de miocardio. Aquellos con niveles más altos de DHEAS en sangre vivían más tiempo y tenían un menor riesgo de enfermedad cardíaca. Estos resultados sugieren que la DHEAS se puede utilizar como estándar de diagnóstico para predecir la enfermedad, la mortalidad y la edad.

Otro estudio evaluó recientemente los efectos de dosis mínimas de DHEA (50 mg / día) en hombres y mujeres de entre 40 y 70 años. Después de 2 semanas, los niveles sanguíneos de las personas casi se habían duplicado. Dormían mejor, se sentían más relajados, tenían más energía y respondían mejor al estrés. No se encontró pérdida de peso en los 3 meses.

Si los estudios en animales y humanos son correctos, un suplemento de DHEA puede prevenir enfermedades, reducir la probabilidad de muerte y prolongar la vida de las personas.

6. Mejora el rendimiento cerebral

También es probable que la DHEA esté estrechamente relacionada con la protección de las neuronas cerebrales de los procesos degenerativos relacionados con la edad, como el Alzheimer. Estos procesos degenerativos no solo ocurren con mayor frecuencia cuando los niveles de DHEA son más bajos, sino que la concentración de DHEA en el cerebro es mucho más alta que en la sangre. El Dr. E. Roberts es un especialista en esta área de investigación. Descubrió que pequeñas cantidades de DHEA son suficientes para aumentar la cantidad de células nerviosas, aumentar su número de contactos con otras y estimular su diferenciación en cultivos celulares. HEA también encontró que la memoria a largo plazo en ratones entrenados mejoró. La DHEA puede desempeñar un papel similar en el cerebro humano.

7. DHEA y el sistema inmunológico

Se ha demostrado que la DHEA mejora la respuesta inmunitaria del cuerpo. Las dosis orales y especialmente subcutáneas de DHEA han protegido a los roedores (ratones, ratas) de infecciones mortales. [. Endocrinol. 150: S209 – 220 (1996)]. Los patógenos probados fueron z. B. virus del herpes tipo 2, virus Coxsackie B4 (CB4)) virus de Epstein-Barr, virus del Nilo Occidental, virus de Sindbis, virus del bosque de Semliki; Bacterias: (Enterococcus faecalis, Pseudomonas aeruginosa) y parásitos: (Cryptosporidium parvum).

Los efectos secundarios de los corticosteroides, como la reducción del tamaño del timo y la supresión de la respuesta inmune, no ocurren con la DHEA. La DHEA no tiene ningún efecto directo sobre los virus. El efecto se produce estimulando los linfocitos (glóbulos blancos), los órganos linfoides y las citoquininas inmunomoduladoras. La DHEA también parece desempeñar un papel especial en las personas infectadas por el VIH. La mayoría de los hombres infectados por el VIH tienen niveles significativamente más bajos de DHEA en la sangre que los hombres no infectados. [J. of the American Medical Association 1989, 261: 1149]. La DHEA inhibe la propagación del virus del VIH tipo 1 en los seres humanos.

[J. Infectar. Dis 1992; 165: 413]

8. DHEA, ¿el esteroide tampón?

Intenta explicar su función fisiológica:

La DHEA es única entre las hormonas porque no tiene especificidad para ciertos receptores hormonales. En el caso de la vitamina E tampoco se encontró afectación metabólica específica. Solo está probado su papel como antioxidante. La DHEA podría funcionar de la misma forma general. El Dr. W. Regelsen declaró que la DHEA podría ser el primer ejemplo de una hormona tampón. Es una hormona de acción amplia que solo despliega su efecto bajo una cierta constelación de factores. Es una hormona amortiguadora contra cambios repentinos en el pH de la sangre. Por lo tanto, a medida que envejece, es más vulnerable al estrés. Si la concentración de DHEA disminuye con la edad, se pierde el tampón contra las hormonas relacionadas con el estrés. El efecto tampón nos protege del envejecimiento. La disminución de la DHEA con la edad podría conducir a una disminución uniforme del sistema responsable de crear los componentes básicos de nuevas células, como los lípidos, los ácidos nucleicos y las hormonas sexuales.

Ebeling y VA. Koivisto del Segundo Departamento de Medicina del Hospital Universitario de Helsinki en Finlandia sugiere que la DHEA tiene un efecto estrogénico o androgénico, dependiendo del entorno hormonal. Hay muchas indicaciones para ello. En algunas líneas de células de cáncer de mama, la DHEA actúa como estrógeno y estimula el crecimiento tumoral a niveles bajos de estrógeno, mientras que la DHEA lo contrarresta en ausencia de estradiol. En hombres con ambiente androgénico, actúa como estrógeno y protege frente a enfermedades cardiovasculares.

9 Posología
Recomendación: La DHEA para fines médicos debe tomarse bajo supervisión médica. Los médicos locales apenas conocen la DHEA. Prácticamente no hay publicación sobre DHEA en alemán en Internet.
No se han determinado con precisión las dosis exactas para humanos. Las dosis diarias pueden variar de 5 a 10 mg hasta 2000 mg. Se han administrado hasta 6-8 g a personas en experimentos sin efectos secundarios importantes Se recomienda llevar su propia concentración de DHEA y DHEAS al nivel a una edad temprana. Por lo tanto, debe realizarse una prueba para determinar su nivel en sangre.
De lo contrario, de 5 a 10 mg es una buena dosis inicial. Por supuesto, esto depende de las propias concentraciones del cuerpo y, además, de la absorción y el metabolismo del propio cuerpo. Si no siente ningún efecto después de aproximadamente una semana, puede aumentar la dosis en otros 5-10 mg. Esto se puede hacer hasta que se alcancen los valores sanguíneos correctos.
Como regla general, 50 mg para mujeres y 100 mg para hombres deberían ser suficientes.
Necesita DHEA "micronizada, recubierta de cera", disponible p. Ej. B. en EE. UU. En Thayer’s Colonial Pharmacy en Florida, EE. UU. (800-848-4809) o Belmar Pharmacy en Colorado (800-525-9473). La DHEA pura, tomada por vía oral, se convierte principalmente en testosterona y dihidrotestosterona; que, como hormonas sexuales masculinas, pueden tener efectos secundarios masculinos indeseables en las mujeres (pelusa y acné leve). Estos efectos androgénicos cesan inmediatamente cuando se reduce la dosis.

La DHEA micronizada entra en el torrente sanguíneo principalmente como DHEA (Am. J. Ob. Gyn. 1992; 166: 1163 y Am. J. Ob. Gyn. 1993; 169: 1536). Los especialistas de Baylor Medical School USA creen que la DHEA, que se absorbe a través de la piel, apenas se convierte en testosterona; También se puede probar la DHEA por vía intranasal.
Los suplementos de DHEA, salvo en dosis muy elevadas, prácticamente no detienen la producción del organismo. Los estudios a largo plazo aún tienen que confirmar esto.
Las píldoras de DHEA que se pueden comprar son fabricadas por la industria farmacéutica. Se elaboran sintéticamente o se obtienen extrayendo esteroides de Discorea, una planta mexicana, más comúnmente diosgenina. Luego, la DHEA se sintetiza a partir de esto. Consumir el extracto de la planta usted mismo para que el cuerpo pueda producir DHEA no tiene ningún efecto, ya que se produce un esteroide diferente según la condición corporal.

La glándula suprarrenal produce una gran cantidad de DHEA por la mañana, pero su concentración desciende durante el día.

Por lo tanto, los científicos recomiendan tomar DHEA por la mañana para estar en sintonía con la rutina diaria natural. Tomarlo por la noche puede provocar insomnio.

La DHEA debe tomarse con alimentos grasos (mantequilla, leche, carne).

10. Resumen

Debido a su función universal en el metabolismo humano, existe una conexión entre varias enfermedades y la DHEA. Esto y la baja toxicidad podrían hacer que la DHEA se convierta en la clave para la terapia en estas áreas. Al igual que con todos los agentes recién descubiertos, se necesitan más estudios para dilucidar su función completa en el metabolismo. Los resultados hasta ahora fomentan esto. En Alemania, la medicina convencional ignora actualmente la DHEA.

 

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